Ya no puedes evitarlo: la temida visita al supermercado. Si asocias tener que ir a la tienda con crisis y berrinches, no estás solo. Desde las luces brillantes hasta el ambiente desconocido y la variedad de paquetes de diferentes colores, el supermercado puede ser una sobrecarga de estimulación para los niños, lo que aumenta el estrés y la frustración. Pero tenemos algunas ideas para hacer tu próxima visita un poco más fácil.
El supermercado está lleno de luces, sonidos, olores y muchas experiencias diferentes. Esto puede ser abrumador para los niños y puede ser difícil que puedan procesar lo que está sucediendo. Debido a que no siempre tienen las palabras para describir lo que sienten, es posible que se porten mal o hagan un berrinche. Las respuestas emocionales pueden ser aún más fuertes cuando los niños están cansados o hambrientos, si sienten que los ignoran o si están aburridos.
Aunque puede ser difícil evitar por completo los berrinches en el supermercado, aquí hay algunas cosas que puedes intentar para ayudar a que las compras sean más fáciles y menos estresantes, tanto para ti como para tu niño:
Si puedes, planifica con anticipación para que tu viaje sea lo más eficiente posible. Haz tu lista de compras y organízala por las diferentes áreas del supermercado para evitar tener que volver a la misma área más de una vez. Por ejemplo, planifica agarrar todas tus frutas y vegetales al mismo tiempo.
Si es posible, intenta visitar la tienda durante las horas de menor actividad, cuando no hay tanta gente. Ir a la tienda cuando hay menos compradores puede reducir la cantidad de estimulación para tu niño y puede hacer que todo sea más rápido, ya que probablemente las filas serán más cortas.
Asegúrate de que tu niño esté bien alimentado y descansado antes de ir. Es mucho más probable que un niño hambriento y cansado tenga una respuesta emocional. Puedes intentar comprarle una botana a tu niño en la tienda para que pueda comer mientras tú haces las compras.
Antes de salir, haz todo lo posible por establecer expectativas y reglas claras. Para hacerlo más divertido, ¡intenten hacer un juego de actuación sobre la visita al supermercado en la casa!
Empaca algunos juguetes sorpresa en tu bolso. Un juguete inesperado puede ser una buena distracción si tu niño comienza a mostrar señales de frustración o inquietud.
Cuando lleguen a la tienda, intenta estas actividades para mantener a tu niño interesado y motivado a seguir tus reglas:
Darle una responsabilidad simple puede ayudarlo a sentirse más independiente y en control. Pídele su opinión al elegir entre dos opciones diferentes. Dale la tarea de tachar cosas de la lista cuando ya estén en el carrito. Desafíalo a contar las cosas que están en el carrito o a identificar formas geométricas.
Algunos niños se sienten motivados por recompensas o incentivos por su buen comportamiento. Puedes intentar prometerle una botana que le guste como regalo después de ir de compras si tu niño se porta bien. Ofrécele realizar una actividad divertida juntos cuando lleguen a casa, como su juego favorito, un proyecto de arte o un paseo familiar.
Alabar a tu niño por su buen comportamiento con palabras y afecto puede ser un fuerte incentivo para que siga comportándose bien. Los niños a menudo escuchan lo que no pueden o no deben hacer. Reconocer el buen comportamiento puede aumentar su confianza y animarlos a seguir comportándose bien.
Cuando comiences a notar señales de frustración o agitación, intenta redirigir a tu niño o involucrarlo en una actividad más positiva que capte su atención y concentración. Juegos como “Veo, veo” pueden ser una gran distracción y al mismo tiempo te permite continuar con tus compras.
Ser padre es a la vez maravilloso y difícil. Es probable que tu niño todavía haga berrinches en el supermercado de vez en cuando, ¡y eso está bien! Es importante tener paciencia contigo mismo y reconocer que estás haciendo lo mejor que puedes. Si te sientes demasiado frustrado o abrumado, siempre puedes tomar descansos llevando a tu niño al auto por unos minutos y regresar después. O puedes volver a intentarlo otro día. Si es posible, también puedes probar un servicio de entrega a domicilio como Instacart o Postmates.
