Como cuidadores, nos esforzamos por crear un ambiente seguro y enriquecedor donde nuestros niños puedan crecer y prosperar. Sin embargo, hay momentos en que la vida les presenta desafíos inesperados. Aunque el estrés es una parte natural de vivir, estar expuesto a un estrés continuo y dañino, llamado estrés tóxico, puede afectar negativamente la salud de los niños. Es importante conocer los signos del estrés tóxico para que podamos brindar el apoyo necesario para protegerlos.
El estrés tóxico ocurre cuando el sistema de estrés del cuerpo se enciende durante mucho tiempo debido a la exposición a dificultades continuas, como la pérdida de un padre o el uso de palabras bruscas, sin suficiente ayuda o apoyo adecuado para mejorarlo. Cuando el estrés tóxico se acumula en el cuerpo, puede tener un impacto negativo en el desarrollo físico, emocional y cognitivo de los niños.
El estrés tóxico es diferente del estrés normal que los niños pueden sentir cuando intentan algo nuevo y desafiante por primera vez, como aprender a amarrarse los zapatos. El estrés tóxico ocurre cuando los cuerpos de los niños no tienen ningún alivio de las reacciones intensas causadas por experiencias traumáticas.
Si tu niño está sufriendo estrés tóxico, puede ser difícil de detectar. No todos los niños mostrarán los mismos síntomas de estrés tóxico. Y algunos niños pueden hasta esconderlos o taparlos. Es importante estar atento a cualquier cambio importante y repentino en la salud física, emocional y mental de tu niño. Aunque los síntomas a continuación no significan necesariamente que tu niño esté sufriendo estrés tóxico, los cambios inesperados y graves en cualquiera de estas categorías pueden ser una señal de que es hora de hablar con un profesional para comprender la causa.
Síntomas físicos:
Dificultad para dormir
Enfermedades frecuentes
Problemas digestivos
Dolores de cabeza
Dolores de estómago
Cambios en su peso
Síntomas emocionales:
Ansiedad
Depresión
Enojo
Aislamiento
Hiperactividad
Irritabilidad
Síntomas cognitivos:
Dificultad para prestar atención
Problemas de memoria
Dificultades de aprendizaje
Pocas habilidades para resolver problemas
Dificultad para hacer amigos
Si crees que tu niño podría estar mostrando síntomas de estrés tóxico, hay muchas maneras diferentes en que puedes ayudar a protegerlo. Ayudar a tu niño a comprender y manejar sus emociones ayuda a evitar que las experiencias difíciles se conviertan en estrés tóxico. También es importante hacerle saber que lo amas y lo apoyas pase lo que pase y que estás ahí para él o ella. Lee más sobre los pasos que puedes tomar para proteger a tu niño del estrés tóxico.
Siempre se recomienda que hables con tu pediatra o un profesional de la salud mental si notas alguno de estos síntomas en tu niño. Ellos pueden ayudarte a determinar si tu niño está experimentando estrés tóxico y cómo puedes ayudarlo.
