Los padres y los cuidadores juegan un papel importante en la vida de sus hijos. Fomentar una conexión fuerte entre padre e hijo puede tener un impacto profundo y positivo en el desarrollo y el éxito a largo plazo del bebé.
Los padres y los cuidadores juegan un papel importante en el desarrollo del vocabulario de sus niños, y según los estudios, cuando se involucran y los cuidan, están ayudando a que crezcan con más capacidad cognitiva y mejor vocabulario a través de las conversaciones y preguntas. Al establecer y mantener una relación segura con sus hijos, los padres y los cuidadores preparan a sus pequeños para tener relaciones saludables y exitosas a largo plazo. De hecho, la relación entre padre y bebé es tan impactante que algunos investigadores han llamado a los beneficios de la presencia paterna “el efecto padre.”
Los padres y los cuidadores pueden desarrollar su vínculo con su bebé al pasar tiempo con él y participando en actividades sensoriales:
Contacto de piel a piel: Apapacha a tu pequeño sosteniéndolo contra tu pecho. Esta acción puede profundizar tu conexión y al mismo tiempo, proporciona todo tipo de beneficios emocionales y de desarrollo para tu bebé.
Leer y cantarle al bebé: Conectarte con tu hijo a través de tu voz, ya sea con canciones o cuentos, puede tener un efecto calmante para él y puede ayudar a aumentar el vínculo entre los dos.
Participar a la hora de bañarlo: Mientras bañas a tu hijo, estás interactuando con él a través del toque, el contacto visual, tu voz e incluso el juego, todo lo cual ayuda a fortalecer tu conexión.
Desarrollar rutinas especiales para el padre y el bebé: Al participar en rutinas específicas con tu hijo, aumentas la cantidad de tiempo que pasas con él y así puedes darle a tu hijo una sensación de estabilidad. Por ejemplo, puedes estableceruna rutina especial para la hora de acostarte con tu bebé al leer un libro juntos o al cantar canciones de cuna todas las noches.
Explorar el mundo juntos: El salir a caminar, ir al supermercado e incluso dar un paseo en automóvil juntos, brindan excelentes momentos para interactuar y conectar con tu pequeño.
Aunque la conexión entre padre y bebé es diferente a la conexión entre madre y bebé, no es menos fuerte ni menos esencial para una infancia feliz y sana. Entre más puedas relacionarte con tu pequeño a través de la conversación, el toque, el contacto visual y otras experiencias sensoriales, más profunda será tu conexión.
