Aprender a ir al baño es un gran paso para los niños pequeños, y puede tomar mucho tiempo y paciencia antes de que estén listos para deshacerse del pañal. Hemos reunido algunas estrategias que puedes probar si necesitas ayudar a tu niño pequeño cómo aprender a usar el baño exitosamente.
Aprender a ir al baño es muy diferente para cada niño y hay muchos métodos que los cuidadores pueden usar. Algunos niños comienzan a usar el baño solos a los 2 años, mientras que otros pueden tener alrededor de 3 años antes de usar el baño de manera constante. ¡Y eso está bien! Para obtener información sobre cómo comenzar a enseñarles a ir al baño, visita nuestro artículo anterior.
Algunos niños sienten ansiedad al aprender a ir al baño y es fácil entender por qué. Usar el baño es completamente nuevo para ellos, y lo desconocido puede asustarlos. Como cuidadores, podemos ayudar a reducir sus miedos y ansiedades manteniendo la calma y no agregando más presión. Las ideas que mostramos a continuación están diseñadas para ayudar a tu hijo a sentirse más cómodo en el baño y en el inodoro, de modo que eventualmente esté dispuesto a ir cuando lo necesite. Como cuidador de tu hijo, tú sabes lo que es mejor para él, así que aplica lo que te funciona e ignora lo que no.
El juego del cronómetro: Esta puede ser una manera divertida de consultar con tu hijo sobre sus necesidades en el baño. Configura un cronómetro para un período corto de tiempo, como 15 o 30 minutos. Cuando suene la alarma, dile "¡Congelado!" y con entusiasmo preguntale si es hora de ir al baño. Si dice que no, reinicia el cronómetro. Si te dice que sí, baila un poco o canta una canción divertida para ir al baño mientras lo llevas a usar el baño. Con el tiempo, puedes intentar configurar el cronómetro por más tiempo.
Dale un amigo para ir al baño: El amigo de tu hijo para ir al baño puede ser un juguete especial o algo con lo que le encanta jugar. Mantén este juguete en el baño para que tu hijo espere verlo cuando sea hora de usar el inodoro. Tener a su amigo también puede darle seguridad a tu hijo, sabiendo que su compañero de inodoro estará allí para saludarlo cuando vaya al baño.
Comienza una colección de calcomanías para el baño: Las calcomanías pueden ser muy motivadoras para los niños. Cada vez que vaya al baño con éxito, dale una nueva calcomanía divertida. También puedes incorporar recompensas adicionales. Por ejemplo, si llega a 10 calcomanías, lo llevarás a comer un helado. Motivar a tu hijo a través de recompensas puede ayudar a reducir parte del estrés que los niños pueden sentir al ir al baño.
Convierte el tiempo de ir al baño en un tiempo para contar cuentos: Pasar tiempo en el baño sin la presión de usarlo puede ayudar a los niños a sentirse más cómodos al sentarse en el inodoro. Leer un libro juntos mientras están en el baño puede ayudar a tu hijo a relajarse y crear recuerdos positivos de estar en el baño.