InicioBuscar por edadesBebé + Niño pequeño + Niño en edad preescolar
Ideas para mantener sano a tu niño durante la temporada de resfriados y gripe
Compartir esta publicación:

Estamos a punto de empezar esa época del año: la temporada de resfriados y gripe. Para muchos padres, solo pensar en tener que lidiar con la congestión nasal e infecciones de oído es terrible. Porque el sistema inmunológico de los niños aún se está desarrollando, ¡podría parecer que tu niño siempre se está enfermando! Aunque es probable que los niños no puedan evitar enfermarse, existen maneras de ayudar a reducir el riesgo.

Banner image

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el otoño y el invierno marcan un aumento en los casos de resfriado común e influenza, generalmente conocida como gripe. Puedes leer nuestro artículo anterior para conocer más sobre los síntomas del resfriado y la gripe.

Los pediatras de Baton Rouge General estiman que los niños pueden resfriarse unas cinco o seis veces al año en promedio, o incluso hasta 10 veces. También explican que es normal que los niños de hasta 3 años tengan dos infecciones de oído y dos o tres casos de vómitos al año.

Enfermarse de resfriado o de gripe es una parte normal del crecimiento, ya que el sistema inmunológico de los niños continúa desarrollándose y fortaleciéndose para que puedan combatir mejor estos virus. La mejor manera de minimizar el riesgo de tu niño es tomar medidas preventivas.

Enséñale a tu niño cómo lavarse bien las manos.

Lavarse las manos con regularidad es una de las mejores maneras de mantener saludable a tu familia porque reduce el riesgo de transmitir gérmenes que pueden causar enfermedades, como resfriados o gripe. Es una buena idea enseñar a los niños desde pequeños las técnicas adecuadas para lavarse las manos.

  1. Moja las manos con agua limpia, usa jabón y lávalas durante al menos 20 segundos. Puedes pedirle que cante la canción del Cumpleaños Feliz para asegurarte de que se lave las manos el tiempo suficiente.

  2. Lava todas las partes de cada mano, incluso entre los dedos.

  3. Enjuaga bien con agua de la llave durante al menos 30 segundos.

A algunos padres les gusta cantar una canción de lavarse las manos para hacerlo más divertido para sus hijos.

Fomenta una alimentación saludable.

Una dieta sana y equilibrada brinda el combustible que el cuerpo de los niños necesita para desarrollar sistemas inmunológicos fuertes. Siempre que puedas, dale a tu niño frutas, verduras y cereales integrales para que los pruebe. Haz todo lo posible para limitar la cantidad de azúcar que tu niño come o bebe. Los pediatras han observado que consumir mucha azúcar puede afectar negativamente el desarrollo del sistema inmunológico de los niños. Nuestro libro de cocina gratuito (disponible en línea para verlo o descargarlo) tiene excelentes ideas de recetas saludables que puedes intentar hacer.

Si tienes alguna pregunta sobre qué alimentos son mejores para la salud de tu niño, habla con tu pediatra o un nutricionista registrado.

Mantén hidratado a tu niño.

Mantenerse hidratado significa asegurarte de que tu niño beba muchos líquidos, principalmente agua, durante el día para mantener su cuerpo nutrido y funcionando de la mejor manera. Cuando el cuerpo está hidratado, es más fácil que los virus se peguen a las mucosas en lugar de meterse al cuerpo.

Un ejemplo de una mucosa es el forro del interior de la nariz, también conocida como mucosa nasal. Esta capa protectora húmeda ayuda a atrapar y filtrar bacterias y virus. Entonces cuando tu niño se suena la nariz o estornuda, la mucosidad sale del cuerpo con el virus.

Asegúrate de que tu niño duerma lo suficiente.

Mientras más duerman los niños, mejor funcionará su sistema inmunológico y menos probabilidades tendrán de enfermarse. La Fundación del Sueño recomienda que:

  • Los bebés de entre 1 mes y 12 meses deben dormir entre 14 y 16 horas en un período de 24 horas.

  • Los niños de entre 1 y 3 años deben dormir entre 11 y 14 horas en un período de 24 horas.

  • Los niños de entre 4 y 6 años deben dormir entre 10 y 13 horas en un período  de 24 horas.

Enséñale el método “del vampiro” para toser y estornudar.

Enséñale a tu niño a cubrirse la boca al toser o estornudar para evitar la transmisión de gérmenes. El método "vampiro" no sólo tiene un nombre divertido, sino que también anima a tu niño a estornudar en el codo, en lugar de en la mano. Con el método del “vampiro”, enséñale a tu niño a estornudar o toser en la curva interior del codo, como un vampiro que se tapa la cara con su capa, para contener los gérmenes y evitar su transmisión. Luego pídele que se lave las manos con agua y jabón.

Jueguen afuera cuando sea posible.

Pasar tiempo al aire libre les da a los niños un descanso de estar en espacios interiores donde los virus pueden transmitirse fácilmente, lo que puede reducir el riesgo de infección. La luz del sol también es una fuente natural de vitamina D, que ayuda a mantener el sistema inmunológico saludable. El juego al aire libre fomenta la actividad física, lo que aumenta la salud y el bienestar general de los niños.

Manténganse al día con las vacunas.

Las vacunas son una manera segura y efectiva de prevenir la transmisión de enfermedades. Se recomiendan para niños y adultos para prevenir la transmisión de infecciones. Vacunar a tu niño contra enfermedades prevenibles ayuda a mantenerlo sano y también protege a otras personas de que se enfermen. A partir de los 6 meses, los niños pueden comenzar a recibir la vacuna contra la gripe, así como la vacuna contra el COVID-19. Si tienes alguna pregunta o inquietud, no dudes en comunicarte con tu pediatra.

Crea un kit de bienestar para llevar.

Si vas a estar fuera de casa, es una buena idea llevar un kit de bienestar en el carro. Esto puede incluir pañuelos desechables, desinfectante para manos, pastillas para la tos, ibuprofeno para niños u otro calmante para dolores y molestias, y si tienes un termómetro a mano, ¡aún mejor! También es posible que quieras incluir toallitas húmedas antibacterianas para usar cuando no sea posible lavarse las manos después de tocar objetos en lugares públicos como las manijas de las puertas o el pasamanos en los centros comerciales (éstas son especialmente útiles durante la temporada de frío).

Apoya el bienestar emocional de tu niño.

Mantener un estado emocional equilibrado y saludable puede beneficiar el sistema inmunológico de los niños. Cuando los niños sienten estrés crónico, también conocido como estrés tóxico, sus cuerpos liberan un exceso de hormonas del estrés, lo cual puede afectar negativamente su sistema inmunológico, haciéndolos más susceptibles a enfermedades, como el resfriado y la gripe.

Crear un ambiente cómodo y seguro y enseñarle estrategias saludables para manejar el estrés puede ayudar a mantener sano a tu niño. Mostrar afecto físico es otra excelente manera de mejorar la salud física y emocional de tu niño. El contacto físico, como darle abrazos, es una excelente manera de ayudar a tu niño a desarrollar un cerebro sano y un cuerpo fuerte.

Lee nuestro artículo anterior para obtener más información sobre lo que puedes hacer si tu niño se enferma.

First 5 California
Aportación de:
First 5 California
¿Ha sido útil?
Únete a nuestra familia First 5, ¡es gratis!
Disfruta de los servicios personalizados según la edad de tu hijo cada vez que visites nuestro sitio web.